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Titulo:LA BANDERA NACIONAL ES LA REPRESENTACIÓN POR EXCELENCIA DE LA SOBERANIA NACIONAL: MINISTRO LUIS MARÍA AGUILAR MORALES
Fecha: 2018-02-26   
Fuente: http://www.scjn.gob.mx


• Nuestros símbolos patrios son la identidad de un país que ha decidido, de manera irreversible, que todas las personas gocen de los derechos humanos reconocidos en la Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano es parte, afirmó en la ceremonia conmemorativa del Día de la Bandera.





La bandera es la representación por excelencia de la soberanía nacional, que reside esencial y originariamente en el pueblo, afirmó el Ministro Luis María Aguilar Morales, Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y del Consejo de la Judicatura Federal (CJF), durante la ceremonia conmemorativa del Día de la Bandera, celebrada en el Campo Marte.



Los símbolos patrios son también el reflejo de la voluntad del pueblo mexicano de ser una república representativa, democrática, laica y federal, sostuvo ante el titular del Ejecutivo Federal Enrique Peña Nieto; los presidentes de las mesas directivas del Senado y la Cámara de Diputados, Ernesto Javier Cordero Arroyo, y Edgar Romo García, respectivamente, y el Gobernador de Tabasco, Arturo Núñez Jiménez, Presidente de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago). 



“Nuestros símbolos patrios son la identidad de un país que ha decidido, de manera irreversible, que todas las personas gocen de los derechos humanos reconocidos en la Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano es parte. Son también los símbolos patrios la identidad de una Nación única e indivisible, con una composición pluricultural sustentada originalmente en sus pueblos indígenas”.



El Ministro Presidente afirmó que la mejor forma de venerar y exaltar la bandera nacional es mediante nuestra plena y orgullosa convicción de que ella es el reflejo de un país que anhela vivir en paz y construir una sociedad más igualitaria, y de recibir del resto de las naciones del mundo el mismo respeto que ofrecemos a cada una de ellas.



Aseveró que la bandera es también un recordatorio constante de que somos mexicanos, y enarbolamos los principios por los que hemos luchado y que habremos de seguir defendiendo: la autodeterminación de los pueblos; la no intervención; la solución pacífica de controversias; la proscripción de la amenaza o el uso de la fuerza en las relaciones internacionales; la igualdad jurídica de los Estados; la cooperación internacional para el desarrollo; el respeto, la protección y promoción de los derechos humanos y la lucha por la paz y la seguridad internacionales. 



La bandera nacional es también, agregó, el manto protector de la dignidad inherente a toda persona. Dignidad entendida no como una simple declaración ética, sino como una norma que consagra un derecho fundamental a favor de la persona y que se proyecta en nuestro ordenamiento como un bien jurídico circunstancial al ser humano, merecedor de la más amplia protección jurídica. 



“La dignidad humana funge como un principio jurídico que permea en todos los ordenamientos, pero también como un derecho fundamental que debe ser respetado en todo caso, y cuya importancia resalta al ser la base y condición para el disfrute de los demás derechos y el desarrollo integral de todos los habitantes de este país”. 



Destacó que, a lo largo de la historia, los pueblos han estado unidos a símbolos con los que se identifican y por los que se sienten representados, por lo que una bandera, como símbolo de identidad colectiva, es la representación del sentimiento y de la historia de una nación. 



El Ministro Aguilar Morales precisó que la enseña patria que hoy conocemos y utilizamos es la cuarta bandera en la historia del país, y que este año cumplirá medio siglo de existencia, pues si bien el Día de la Bandera se instituyó en 1940, fue el 17 de agosto de 1968 cuando se promulgó la Ley sobre el Escudo, la Bandera y el Himno Nacionales, que estableció las características del lábaro patrio y le dio su marco jurídico. 



“Cincuenta años más tarde, podemos estar orgullosos, no solo de nuestros símbolos patrios, sino de su perdurabilidad. Y si bien la Ley no le atribuye un significado específico a cada color, se acepta comúnmente que el verde representa la esperanza, el blanco la unidad, y el rojo, la sangre de los héroes nacionales”, enfatizó. 



Recordó que el 24 de febrero de 1821, cuando Agustín de Iturbide y Vicente Guerrero dieron a conocer el Pan de Iguala, que proclamaba la Independencia de México y cuyos principios fundamentales eran las tres garantías: independencia, religión y unión, las cuales quedaron plasmadas en una bandera que desplegaba en franjas diagonales los colores verde, blanco y rojo, y fue entregada a las fuerzas de ambos caudillos. 



“Desde entonces, la gesta independentista se tornó irreversible; la bandera marcó el rumbo: México tenía que ser una nación soberana en el concierto de las naciones. la bandera de México, nuestra hermosa enseña nacional, desde sus orígenes, y hasta nuestros días, sigue representando, de forma sublime y solemne, nuestra identidad como pueblo, si bien plural, convergente también, en ese punto de afinidad indiscutible: la patria”, puntualizó



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